Los modelos de ciudad están en continua evolución. Los planteamientos urbanísticos del pasado siglo resultan poco integradores y antiguos. Por ello, las grandes urbes incorporarán nuevos elementos en su diseño ya que deben afrontar grandes retos relacionados con las novedades en la  forma de vida y costumbres de sus habitantes. El urbanismo debe facilitar y fomentar el crecimiento económico, el empleo y la instalación de nuevos negocios, y, además, garantizar la sostenibilidad y la reducción del consumo energético, la inclusión social, y la movilidad —peatonal, pública y verde— de sus habitantes.

El equilibrio se planteará tratando de conjugar los nuevos hábitos de vida y  las fórmulas empresariales alternativas que se plantearán en los próximos años. Estos desafíos exigen planteamientos diferentes a la hora de abordar la regeneración urbana. Un grupo de expertos debatió sobre este importante tema y comentó varias alternativas . “Nadie puede pensar en el desarrollo de la ciudad sin tener en cuenta el consenso, la sostenibilidad y la inclusión social”, explicó Martha Thorne, decana del IE School of Architecture and Design y directora ejecutiva de los premios de arquitectura Pritzker. “Es necesaria la complicidad del sector privado, la ciudadanía y los grupos políticos para planificar las ciudades a largo plazo con una visión global y una dimensión metropolitana y no se puede entender la transformación de las ciudades sin esto”, añadió.

París y Londres son dos grandes ciudades que podemos mencionar como ejemplo de regeneración urbana con criterios de sostenibilidad, que se desarrollan a través de la colaboración público-privada, sin la cual son inviables los nuevos planteamientos.

La capital francesa explora desde 2014 un nuevo urbanismo con la iniciativa Reinventar París, una convocatoria para que las empresas privadas transformen 23 edificios y espacios de propiedad pública en proyectos centrados en la sostenibilidad y el ciudadano.

En Londres se desarrolla King’s Cross, un proyecto de regeneración urbana en el centro de la urbe. Se necesitaron varios años de estudio y análisis entre el gobierno, la comunidad local y otros agentes implicados, convirtiéndose en un proceso participativo de gran alcance a nivel social, económico y cultural. Está previsto que finalice en 2020.

Ejemplo para Madrid

El proyecto que más paralelismos tiene con París y Londres es Madrid Nuevo Norte, uno de los mayores desarrollos urbanísticos de la ciudad que, tras varias décadas de negociaciones, ya tiene luz verde.

Este será un ejemplo de regeneración urbana moderna, con usos mixtos, que comparte con los otros proyectos europeos la idea de que la ciudad extensa no tiene sentido.

Además, la capital de España tiene en marcha otros grandes desarrollos que reinventarán su modelo de ciudad en los próximos años: la remodelación del estadio Santiago Bernabéu, la operación Mahou-Calderón, el Edificio España, Canalejas y el paseo de la Dirección son los más destacados.

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